11 de abril de 2020

MIERDA, CAGAO Y CULO.



MIERDA, CAGAO Y CULO.

Cuando éramos niños pequeños balbuceantes, nos asomábamos a la mesa donde estaban nuestros padres ocupados en sus cosas y les espetábamos: “mierda, cagao y culo" y echábamos a correr por el pasillo, con ellos vociferando detrás: "¿qué has dicho?" y soltábamos una carcajada de terror, que a nuestros padres le resultaba enternecedora, y se daban la vuelta para no manifestar ese orgullo de ver que nos hacíamos mayores en medio de picardías que no sabíamos muy bien de qué se trataban.
            Yo a ustedes, señores diputados y sus asistentes, les digo lo mismo. Son unos ineptos, unos cara duras, unos incomprensiblemente desalmados. No tienen vergüenza y nos desprecian.
            Ustedes, señores diputados, están asombrados del comportamiento del pueblo al que representan porque no nos conocen, no nos quieren, no nos miman, no nos entienden. Leen las columnas de los sabios de turno que miran a Europa, donde todo se diluye, donde el COVID-19 está a la distancia de seguridad de más de dos metros y no necesitan mascarilla ni guantes para relacionarse entre ustedes, aunque tampoco se conocen.
            Señores diputados. Por si no se enteraron en las últimas elecciones, les pedimos con nuestro voto que dialogaran, que aceptaran toda clase de ideas y propuestas para gobernarnos, que dejaran de insultarse, de pegarse palos por debajo de la mesa, que dejaran de hacer el imbécil de una vez, pero parece que ese día no fueron a clase, hicieron novillos y se siguen dedicando a matar a las ranas del charco en el que se han metido, a pedradas.
            Señores diputados. Todos los diputados. Ahora es el momento de saber gobernar, ahora es cuando se les necesita sabios, tiernos y agradecidos a quienes les votamos, pero todos a una. Lo que hasta el día 14 de marzo estaban haciendo era chupar del bote. Ahora es cuando se sabe quién gobierna o propone al que gobierna, cómo se hacen las cosas sin insultar, sin amenazar, sin poner muertos en la mesa, sin ocultar a los héroes que se van en silencio, sin obviar a las mujeres. Por cierto, como veo que les gusta contar, cuenten los hombres que salen a la compra y las mujeres que lo hacen: van a flipar, si saben contar.
            Señores diputados. Ya está bien de canalladas, insultos, patadas en las espinillas, independentismos ruinosos, propuestas reaccionarias, y sentirse dolidos porque el jefe no llama al otro jefe, decir quién luce el mejor atuendo, quién pasea más ante el espejo o quién se reúne más.
            Han puesto al ejército en el ojo de mira de la opinión pública, en lugar de dejarlos a lo suyo y en silencio. Se dedican a dar ruedas de prensa que repiten una y otra vez la misma monserga de lo que nos van a denunciar, los números de la guardia civil que nos va a acosar, los chalecos con los que han marcado a los discapacitados … ¿pero no nos conocen? Somos España, ese país que tiene el récord mundial de donantes de órganos, ese país que sólo tiene que descolgar el teléfono para pedir sangre de cualquier grupo, ese país que salió de la ruina en la que nos metieron en 2008 a base de familia, de estar juntos y protegernos de ustedes.
            Señores diputados. ¡Siéntense a hablar de una puñetera vez!
            Están descubriendo el país que tienen en sus manos. No se lo creen porque, repito, no nos conocen. Somos buenos, generosos, imaginativos, cultos más que otros porque tenemos mucha calle, besucones, espléndidos y llorones.
            Señores diputados, ¡quiérannos por favor! Dejen de discutir y sean un poquito como los demás. Luego, si hace falta, les limpiamos las alfombras si las ensucian por pisar la calle.

Matilde Muro Castillo.

8 comentarios:

Unknown dijo...

Eres una crack. Cuanta razón en tus palabras. Gracias.

Unknown dijo...

Buenísimo 😘

Susana dijo...

Totalmente de acuerdo querida Matilde¡¡¡

Unknown dijo...

Deberían imprimirse miles de hojas volantes de este artículo y repartirse a la entrada del Congreso de los Diputados. Estupendo!

Anónimo dijo...

¡Bravo!

Anaggl dijo...

Genial,como siempre!!!

helianasanchez dijo...

Excelente Matilde! Me ha encantado! Tan CLARO!!

Unknown dijo...

que gran realidad